Tengo el placer de mudarme de sección este mes para hablar de uno de los mangas que mĆ”s me ha apasionado en los Ćŗltimos aƱos, un manga que habla sobre la vida de uno de los guerreros samurĆ”is mĆ”s importantes de la historia de Japón: Miyamoto Musashi. Dibujado por el inconmensurable Takehiko Inoue (creador de otros populares mangas como Slam Dunk), y basado en las novelas del famoso escritor histórico Eiji Yoshikawa, estamos ante una obra autobiogrĆ”fica que nos cuenta la vida de este famoso samurĆ”i desde que abandonó su aldea natal de Miyamoto en busca de fama y perfeccionar sus habilidades con la espada, hasta que se convirtió en el legendario guerrero que es considerado hoy en dĆ­a, autor de “El libro de los cinco anillos”, un tratado sobre las artes marciales y la estrategia militar cuyo contenido es aĆŗn a dĆ­a de hoy una referencia en la sociedad japonesa. No perdĆ”is la oportunidad de adentraros en esta apasionante historia a travĆ©s de la pluma del maestro Inoue, uno de los mangakas con mĆ”s talento que existen hoy en dĆ­a. Bienvenidos al mayor homenaje que se podrĆ­a hacer al bushido (el camino de la espada), y a uno de sus mayores valedores. Bienvenidos a “Vagabond”.
“El periodo Sengoku y la batalla de Sekigahara”.

Antes de adentrarnos en el argumento y caracterĆ­sticas de la obra, serĆ­a apropiado conocer un poco sobre el contexto histórico en el que se producen los hechos. SegĆŗn los datos históricos, Musashi nació en el aƱo 1584, en los Ćŗltimos coletazos del Periodo Sengoku, una etapa conocida como el “periodo de los estados en guerra”, en las que los distintos Daimyo del paĆ­s (soberanos feudales que gobernaban en diferentes territorios) luchaban entre sĆ­ aprovechando la desconfianza que se creó alrededor del Shogun (gobernante militar que regĆ­a el paĆ­s, cuyo poder polĆ­tico estaba por encima del propio emperador), creĆ”ndose numerosos bandos que dieron lugar a prolongadas guerras civiles. Fue un periodo caótico, en el que existĆ­a una gran desestabilización social y económica y en la que la seguridad de los ciudadanos estaba en constante peligro. Esto produjo que se hiciera un uso indiscriminado de las armas para poder defenderse, en especial de la katana, que se convirtió en la principal arma de defensa entre los samurĆ”is que se la podĆ­an permitir. Todo esto llevó a que se comenzara a estudiar de manera intensiva el arte de manejar la espada, ya que en un periodo tan peligroso como este, aquel que fuera mĆ”s diestro en su manejo tenĆ­a mĆ”s posibilidades de sobrevivir. Esta etapa se prolongó en el paĆ­s por casi dos siglos (1467-1615).

El periodo Sengoku comenzó su declive a raíz de la famosa batalla de Sekigahara (1600), en la que el bando de los seguidores del mÔs poderoso Daimyo del país, Hideyoshi Toyotomi, se enfrentó en una cruenta batalla de tres días a los seguidores de Tokugawa Leyasu, otro importante Daimyo que había adquirido una fuerza considerable aliÔndose con los principales enemigos del clan Toyotomi. La victoria cayó del lado del clan Tokugawa, y Leyasu obtuvo el control de prÔcticamente todo el país, y se nombró a sí mismo Shogun de Japón. Pese a que se puede decir que el periodo Sengoku acabó tras esta batalla, técnicamente no terminó hasta la erradicación total del clan Toyotomi, en 1615, fecha en la que dio inicio el Periodo Edo (1615-1898), una época de relativa paz gobernada durante mÔs de 250 años bajo el mandato del Shogunato de Tokugawa. Durante esta época se produjo un fuerte aislamiento del país respecto al exterior, las armas fueron prohibidas y los samurÔis fueron obligados a convertirse en campesinos o a convertirse en sirvientes a sueldo de los diferentes Daimyo. Durante este tiempo la figura del samurÔi fue poco a poco decreciendo, hasta su total desaparición en 1868 con la caída del Shogunato de Tokugawa frente a las fuerzas del Emperador Meiji. Así pues, Miyamoto Musashi vivió durante una época de grandes cambios e inestabilidad, y dedicó su vida al peregrinaje para aprender todos los secretos del arte de la espada.

“Shinmen Takezo: un joven con grandes sueƱos”.
Como comentaba mĆ”s arriba, Miyamoto Musashi (cuyo nombre real es Shinmen Takezo) nació en la pequeƱa aldea de Miyamoto en 1584, y desde bien pequeƱo tenĆ­a grandes cualidades en el manejo de la katana, una fuerte y agresiva personalidad, y un gran instinto de supervivencia, desarrollado principalmente por las dificultades que tuvo que sufrir a causa de su progenitor, un famoso y estricto samurĆ”i que pocas veces actuó como un verdadero padre. Con el sueƱo de hacerse un nombre y convertirse en el guerrero mĆ”s famoso de Japón, Takezo abandona su aldea natal junto con su mejor amigo, Hon´iden Matahachi. Ambos participaron en la batalla de Sekigahara (se cuenta que del lado del clan Tokugawa), sobreviviendo a duras penas, y finalmente el destino los separó, comenzando Takezo una vida de vagabundo con el objetivo de enfrentarse a los mejores guerreros del paĆ­s, a la vez de pulir su tĆ©cnica con la espada. Es durante ese momento cuando adquiere otro nombre, el de Miyamoto Musashi, y comienza poco a poco a hacerse famoso, convirtiĆ©ndose en todo un experto en el bushido, y creando el estilo de kenjutsu Niten Ichi Ryu, especializado en el combate con dos armas, utilizando la Katana y el Jutte, un estilo de combate muy famoso que sigue muy vigente hoy en dĆ­a.

“Takehiko Inoue: del baloncesto a los samurĆ”is”.

Cuando Takehiko Inoue se hizo a cargo de esta historia, lo hizo basĆ”ndose en las novelas de Eiji Yoshikawa, aunque como Ć©l mismo ha confirmado en mĆ”s de una ocasión, tambiĆ©n se ha tomado sus propias licencias históricas, intentando siempre mostrar una perspectiva mucho mĆ”s realista y humana de la casi misticista figura de Musashi. Vagabond comenzó a serializarse en 1998 a travĆ©s de una de las revistas de la editorial Kōdansha, Morning, y hasta el momento se han publicado 34 tomos. Desde entonces ha acaparado multitud de premios tanto para la obra como para el autor, vendiendo mĆ”s de 20 millones de copias alrededor del mundo. Inoue ya se hizo mundialmente famoso gracias a Slam Dunk, su anterior obra, aunque en esta ocasión quiso adentrarse en el gĆ©nero seinen con una historia mĆ”s seria y adulta, que lo han catapultado como uno de los mejores mangakas de la actualidad.
Lo que mÔs impresiona de este manga, aparte de su historia (que al fin y al cabo es adaptada) es su sensacional dibujo. Desde el principio hasta sus últimos capítulos, cada pÔgina de cada capítulo es una verdadera obra maestra, alcanzando cotas épicas en estos últimos tomos, donde el trazo de Inoue ha mejorado hasta límites difíciles de creer, dada la gran calidad que tenía el dibujo ya desde sus comienzos. El nivel de detalle de los rostros, los escenarios y las emociones en los gestos de los personajes estÔn sin duda a otro nivel, a un nivel donde muy pocos pueden llegar, y todo hecho a mano, sin técnicas informÔticas. Puedo decir sin miedo a equivocarme que estamos posiblemente ante uno de los tres mangas mejor dibujados de la actualidad, con permiso de otros pesos pesados como Kentaro Miura. Inoue es un gran amante del detalle y el realismo, y eso se puede apreciar en sus ilustraciones, donde muchas veces no necesita palabras para transmitir lo que sienten los personajes, y cosas como la sangre, el sudor, los desmembramientos o las heridas y golpes estÔn hechos con calma y todo lujo de detalles, convirtiendo el manga eso sí en una obra para adultos, con partes bastante gore, aunque nada fuera de lo que se puede considerar normal teniendo en cuenta la temÔtica que trata. Como curiosidad, Inoue se basó en su propio rostro para crear el de Musashi, y según comentó en alguna ocasión, varios rostros de otros personajes estÔn basados en personas que conoce. Algo curioso sin duda.

Si a este excelente dibujo le unimos una historia apasionante, basada en una de las figuras históricas mÔs importantes de Japón, acompañado por unos personajes secundarios carismÔticos (como pueden ser el principal rival de Musashi, el samurÔi sordo mudo Sasaki Kojiro, o el monje budista Takuan Soho), y mezclado con espectaculares y realistas combates, o toques de romance y filosofía, nos sale como resultado un manga imprescindible para cualquiera que le guste un poco la temÔtica del Japón feudal, e incluso si no te interesa, es recomendable leerlo, ya que al estar basado en hechos reales (con sus licencias, eso sí), al mismo tiempo podemos aprender algo de historia, que nunca viene mal.

En definitiva, estamos ante uno de los mejores mangas sobre samurĆ”is que existen en la actualidad, al nivel de otros pesos pesados como “La Espada del Inmortal” o “El Lobo solitario y su cachorro”, con un dibujo espectacular, un argumento pausado pero amante de los detalles e impactantes y realistas combates que te trasladarĆ”n sin apenas darte cuenta a toda esa ambientación del Japón feudal. Un manga que te atraparĆ” desde el primer minuto, y cuya Ćŗnica pega es que nos pongamos al dĆ­a y nos toque esperar a que se publique el siguiente capĆ­tulo, dada la gran irregularidad con la que Inoue publica sus mangas. Hasta entonces, si todavĆ­a no lo conoces, tienes mĆ”s de 30 tomos por delante para conocer esta apasionante historia. No le des mĆ”s vueltas y lĆ©elo, ten por seguro que no te arrepentirĆ”s.

Ficha tƩcnica
 
Publicación: Revista Morning.

Autor: Takehiko Inoue.

CategorĆ­a: Seinen.

Género: Histórico, BiogrÔfico.

NĀŗ Tomos: 34 (abierto).

AƱo: 1998 - actualidad.