Hoy reseño uno de los animes que se estrenó este pasado verano en la plataforma Netflix. Se trata de la última obra de Masaaki Yuasa, director, entre otras, de Ride your Wave, Keep yout hands off Eizouken! o Devilman Crybaby. En esta ocasión nos traerá la adaptación animada de la novela Nihon Chinbotsu, de Sakyo Komatsu, escrita en 1973, en donde nos presenta una realidad en la que, tras varios terremotos de gran magnitud, Japón comienza a hundirse en el Pacífico.

La familia Mutoh al completo

Aquel parece un día normal para la familia Mutoh: Mari, la madre, está volviendo en avión de un viaje de negocios; Ayumi, la hija mayor, está entrenando para la próxima competición de atletismo; el hijo pequeño, Go, está en casa jugando a la consola; y el padre, Koichiro, está trabajando en la construcción de un Estadio Olímpico.  Justo en ese momento, sus vidas cambiarán para siempre, ya que un fuerte terremoto, acompañado de sus correspondientes réplicas y un esperable tsunami, asolará Japón y lo destruirá. La familia Mutoh intentará regresar a casa por todos los medios para reunirse, lo cual lograrán hacer en un templo sintoísta cercano, en el que descubrirán, junto a otros supervivientes que, debido a la magnitud de los movimientos sísmicos, el archipiélago japonés se está hundiendo en el océano pacífico.

Seguro que a cualquier de vosotros recuerda haber visto alguna película sobre desastres naturales donde un grupo de supervivientes buscan llegar a un lugar seguro. Pues «2020: El hundimiento de Japón» es una de esas, así que al menos ya vamos preparados para llorar como unas desgraciadas porque, aunque sepamos que no debemos encariñarnos con ninguno de los personajes, vamos a acabar haciéndolo. Esto sucede porque la gran mayoría de ellos, tanto principales como secundarios, están muy bien definidos, cada uno tiene su propio trasfondo y una personalidad reconocible, por lo que puedes llegar a empatizar con algunos aspectos de ellos. Craso error, porque cuando mueran trágicamente, que lo harán, lo vas a pasar peor.

Para mí, es la primera obra que veo de Masaaki Yuasa y desde la sinceridad os digo que la animación me ha parecido una basura, además de ser bastante inconstante en su calidad, donde tenemos capítulos mejor animados y otros en los que los personajes parecen garabatos. Como no he visto nada más de él, no puedo generalizar, pero vamos, que aquí no vais a encontrar una excelente animación como puede verse en otras producciones actuales.


Así que, en resumen, guion bien, animación mal. Aunque con final predecible, en donde incluso puedes ir haciendo tu propia quiniela de quién muere y quién sobrevive, si te apetece ver una serie de desastres naturales sin un final (spoiler) demasiado malrollero (fin del spoiler), y pasas por encima de la animación o eres fan de las obras de Yuasa, te la recomiendo.