Camellia Sinensis. Ese es el nombre tĆ©cnico del arbusto del tĆ©, la bebida mĆ”s consumida del mundo, solo por detrĆ”s del agua. JapĆ³n se caracteriza por una antiquĆ­sima y representativa cultura en torno a esta saludable y deliciosa bebida, siendo el paĆ­s asiĆ”tico donde mĆ”s se consume, incluso por encima de Chica, paĆ­s que lo introdujo en Ć©l.

                En un principio, el tĆ© era la bebida que tomaban los monjes budistas para aclarar la mente y ayudar a la meditaciĆ³n. Cuando JapĆ³n tomĆ³ contacto con esta religiĆ³n, lo hizo tambiĆ©n con el tĆ©, si bien en sus primeras Ć©pocas solo los religiosos, los aristĆ³cratas y las clases pudientes podĆ­an permitirse el saboreo de una infusiĆ³n -por entonces- muy cara y cuyo consumo estaba ligado a la cultura y al refinamiento. TambiĆ©n por aquĆ©l entonces el tĆ© no tenĆ­a mucho misterio, se utilizaban las hojas fermentadas (marchitadas) en agua caliente y en ocasiones se mezclaban con miel, canela, o ciruelas para matarle el amargor y darle sabor, eso era todo. Pero enseguida el pueblo japonĆ©s empezĆ³ a experimentar con aquellas hojas y a investigar nuevas maneras de beberlas, creando lo que hoy se conoce como La ceremonia del tĆ©.

                La ceremonia del tĆ© es un proceso muy elaborado que no solo nos permite disfrutar de una taza de tĆ© matcha, el elegido para la misma, sino que nos ofrece todo un viaje por la meditaciĆ³n y la paz mental, un regalo para nuestro cerebro y sentidos, y un deleite en todas sus formas. La ceremonia del tĆ© suele durar hasta cuatro horas, pero puede hacerse en un tiempo inferior.




                Para llevar a cabo la ceremonia del tĆ©, los invitados eran (y son, puesto que aĆŗn a dĆ­a de hoy, se trata de un acto social de relevancia) llevados a la casa de tĆ©, que solĆ­a hallarse en un bello rincĆ³n del jardĆ­n. Para llegar allĆ­, pasaban por un camino de piedra que habĆ­a sido previamente regado para simbolizar el lavado que debĆ­amos hacer de nuestras preocupaciones diarias. Los invitados van a pasar un tiempo ocupĆ”ndose sĆ³lo de la belleza, de modo que deben abandonar todo lo mundano (temores, preocupaciones, ansiedades…) en este camino y entrar en la casa de tĆ© purificados. Para ello, antes de entrar tambiĆ©n se lavarĆ”n manos y boca con un cacillo de agua corriente, de igual manera que si entraran en un templo. Una vez en la casa de tĆ©, se descalzarĆ”n y serĆ”n obsequiados con una comida ligera a la vez que contemplan el arreglo floral y los distintos pergaminos (de dibujos o caligrafĆ­a) que haya elegido el maestro del tĆ©. Acabada la colaciĆ³n, disfrutarĆ”n primero del tĆ© koicha (espeso), del que solo tomarĆ”n uno o dos sorbos, y despuĆ©s el usucha (claro o ligero), del que tomarĆ”n un cuenco entero. Entre la colaciĆ³n y el tĆ©, los invitados se lavarĆ”n de nuevo la boca para abrir el paladar a los sabores del tĆ©.

                La preparaciĆ³n del tĆ© matcha no es difĆ­cil, pero en una ceremonia del tĆ© se exige hacerlo de la forma «mĆ”s bella, graciosa y encantadora que sea posible», lo que a efectos prĆ”cticos se reduce a soltura y economĆ­a de movimientos. Si queremos preparar este tĆ© en casa, necesitaremos tĆ© matcha, un cuenco grande, una cucharita de bambĆŗ y un batidor del mismo material. Esto es importante, porque los utensilios de plĆ”stico o metal alteran el sabor del tĆ©. Primero debemos calentar agua en abundancia, y echarla al bol para calentarlo, para que la infusiĆ³n no «se asuste» al caer en un cuenco frĆ­o. Desechamos esta agua, secamos el cuenco, y en Ć©ste servimos una cucharada colmada de tĆ© en polvo. AƱadimos agua caliente solo para cubrir el fondo y batimos con el batidor, primero lentamente y despuĆ©s aumentado progresivamente la velocidad, hasta formar una crema espesa y espumosa. Este es el koicha (se puede tomar un sorbito, tened en cuenta que es tĆ© concentrado; sabe muy fuerte). Una vez obtenido, aƱadimos el resto de agua caliente hasta llenar el cuenco y tendremos listo nuestro usucha.

Diferentes tipos de tƩs japoneses

                Pese a que el matcha es el representativo de esta ceremonia y el mĆ”s famoso, no es el Ćŗnico creado en JapĆ³n para el disfrute de los aficionados. En los Ćŗltimos tiempos se ha hecho famoso el gyokuro green tea, o tĆ© verde gyokuro, cuyo nombre puede traducirse por «rocĆ­o de jade», llamado asĆ­ por el color verde pĆ”lido, similar al del jade, que tiene al infusionar. ¿En quĆ© consiste este tĆ©? En una particular forma de cultivo. En la mayor parte de las plantaciones de tĆ©, las plantas estĆ”n recibiendo luz solar constantemente, pero los arbustos destinados a la producciĆ³n de gyokuro, unas dos o tres semanas antes de su recolecciĆ³n, se techan para que sigan creciendo a la sombra. Esto hace que se estimule la producciĆ³n de clorofila y bajen las catequinas, que producen el amargor del tĆ©. Este proceso de maduraciĆ³n produce una infusiĆ³n ligeramente dulce, muy refrescante, de delicado sabor y aroma muy caracterĆ­stico, «como a hierba reciĆ©n cortada», segĆŗn dicen los expertos. Asimismo, su contenido en clorofila purifica el aliento y previene las enfermedades dentales, estimula la quema de grasas y posee aĆŗn mĆ”s antioxidantes que el tĆ© blanco. Este «rocĆ­o de jade» estĆ” considerado -junto al escasĆ­simo tĆ© dorado- el tĆ© de mayor calidad del mundo. Como podrĆ©is suponer, eso se refleja en su precio, no prohibitivo, pero sĆ­ muy caro: en torno a veinte euros los cien gramos.
Kampai!

«El tĆ© es una obra de arte y necesita una mano magistral que sepa sacarle de dentro sus cualidades mĆ”s nobles» Kakuzo Okakura, El libro del tĆ©.