Esta es la historia de dos hermanos. Uno estĆ” muerto.

     Ahora que vuestra ropa interior estĆ” en el suelo del susto, tras ver la aterradora portada de Camisa de fuerza y vuestras pesadillas sobre manicomios toman forma, bienvenidos al Hospital MClaine.

     Alexandra Wagner ingresa en el prestigioso psiquiĆ”trico MClaine. No es pĆŗblico, pero su caso despierta la curiosidad de los mĆ©dicos. Asesinó a su hermano mellizo para liberar su alma del otro lado. Los intrusos estĆ”n por todas partes y ella quiere proteger al mundo. Thomas Hayes serĆ” su mĆ©dico y tal vez ella no estĆ© tan trastornada como parece…

     El Torres se estĆ” convirtiendo en sinónimo de terror asegurado. Tras El Bosque de los suicidas yEl Velo, vuelve a sumergirnos en una historia de esas que levantan ampollas, con un guion impecable y pesadillas a flor de piel. Si tuviera que compararle con alguien, sin duda serĆ­a con Junji Ito, el maestro nipón que saca punta de cualquier hecho mundano, llevĆ”ndolo al lĆ­mite de la locura. El Torres roza ese nivel. Atmósferas opresivas, personajes cotidianos que albergan secretos terrorĆ­ficos y que harĆ”n que dormir sea un poco mĆ”s difĆ­cil.


    Toda obra con el sello de El Torres es garantĆ­a de calidad, no en vano obtuvo el premio a mejor obra nacional con El Fantasma de GaudĆ­, junto a JesĆŗs Alonso Iglesias en el 34Āŗ Salón del Cómic de Barcelona y en Expocómic Madrid y aunque el mundo del horror estĆ” a sus pies, tiene en su haber grandes obras fuera del gĆ©nero, como Bribones, La Huella de Lorca o el tan conocido Virtual Hero, pero los que le adoramos, lo hacemos desde el horror de sus historias.

    Guillermo Sanna es todo un descubrimiento. De narrativa espectacular y un uso del color increĆ­ble, aporta las pinceladas del rojo sangre que casan tan bien con esta obra. Una lĆ­nea que parece sencilla, con escasez de fondos y que otorga toda la fuerza a los personajes principales, donde los detalles estĆ”n en las expresiones y en el movimiento. Actualmente trabaja para Marvel, pero esperamos mĆ”s obras en las que desarrolle todo su “poder pictórico”.
    
     Camisa de Fuerza estĆ” al nivel de El Velo, con giros argumentales que te atraparĆ”n; un catatónico que despierta por un momento, Alex tildada de esquizofrĆ©nica en un principio y un raro caso de sĆ­ndrome de la luna despuĆ©s (y solo compartirĆ­a los sĆ­ntomas de psicosis, irritabilidad o ansiedad. Los demĆ”s, son debatibles), despertarĆ” los miedos de los cuidadores, de apariencia fuerte y con terrores, como todo el mundo.

   
 Las cosas inexplicables siempre son tildadas de locura, el «solo creo lo que veo» (y toco, me atreverĆ­a a decir) estĆ” tan instaurado en la sociedad que cuando algo no se puede ver con los ojos o analizar de alguna manera, hablamos de locura.

     Los psiquiĆ”tricos son un caldo de cultivo excepcional para historias terrorĆ­ficas y que El Torres lo usara como eje de sus (nunca mejor dicho) locuras era cuestión de tiempo. Con El Velo como trasfondo (hay un cameo en el que incluso vemos la portada del cómic), una niƱa que ha asesinado brutalmente a su mellizo es internada. El SĆ­ndrome Luna (alusión a su otra obra, Las Brujas de Westwood, totalmente recomendable tambiĆ©n) o nombrar la serie Ghost World (basada en el cómic homónimo de Daniel Clowes, tambiĆ©n autor de la inquietante Como un guante de seda forjado en hierro ) nos da pistas sobre los gustos del guionista por el horror. No dejĆ©is de disfrutar del dibujo de Sanna, opresor, con un punto macabro y fuera de dudas para esta obra que sin duda le abrirĆ” puertas.

     QuizĆ”s no sea la mejor obra de El Torres pero sĆ­ tiene mucho de Ć©l y si os gustó El Velo, no dudĆ©is. Todo se pega menos la hermosura. Hasta los monstruos.