Existe un mundo en el que un patinador artĆstico japonĆ©s y su instructor ruso son pareja de forma abierta, sin que nadie mueva una pestaƱa ni que exista el mĆ”s mĆnimo conflicto al respecto. Lamentablemente, de momento sólo existe en la ficción, pero no deja de ser una ficción realista que nos permite soƱar con que un mundo un poquito mejor, es posible. Un mundo en el que una historia de amor entre dos hombres es tratada con naturalidad y donde ni siquiera es un elemento central de la historia.
Os habla alguien que nunca ha sido muy fan ni de la temĆ”tica deportiva, ni del yaoi. La primera por su constante afĆ”n hiperbólico (lo estĆ”is pensando: los campos de fĆŗtbol interminables de Captain Tsubasa son un clĆ”sico) y la segunda por sus frecuentes elementos de tragedia y vergüenza que, aunque ayudan a la visibilidad, lo de normalizar lo tienen aĆŗn pendiente. Sólo por esto, ya estamos ante un tĆtulo revolucionario.
En resumen: La carrera deportiva de Yuri Katsuki parece estar a punto de acabar tras una desastrosa actuación en su Ćŗltimo Grand Prix, tras la cual vuelve a casa derrotado y queriendo desaparecer de la vista de todos. La filtración de un video donde, libre de la presión competitiva, logra ejecutar a la perfección la rutina de su Ćdolo y actual campeón de patinaje, Victor Nikiforov, desencadena el interĆ©s de este Ćŗltimo en desplazarse a Japón para convertirse el entrenador personal de Yuri.
El resto es historia. Un argumento bien hilvanado de principio a fin gracias a un guión con mĆŗltiples capas. La cuidadosa planificación de eventos otorga mĆ”s profundidad a determinadas situaciones que, a priori, parecĆan mĆ”s sencillas o menos razonables. No explico mĆ”s para no destriparlo, pero son detalles cuyo descubrimiento comporta un mayor disfrute de capĆtulos pasados, y da ganas de verla una segunda vez para apreciar el conjunto, ya con todas las piezas estĆ”n en su sitio.
De la misma forma, los personajes principales son construidos de forma multidimensional, con motivaciones y aspiraciones mÔs allÔ de la pista de hielo, que permiten la identificación con su audiencia. Incluso los secundarios estÔn hechos con mimo. Su cuota de pantalla es menor, pero son evidentes los esfuerzos para que no sean simple ruido de fondo, sino personajes con sus propias historias, en los que se puede intuir mÔs complejidad que el sólo hecho de ser adversarios deportivos. Y un gran componente a la hora de lograr esto ha sido la inclusión del papel que juegan actualmente las redes sociales.
El detonante de la historia es un video colgado en YouTube e Instagram, cuya relevancia es casi omnipresente, con referencias constantes a sus protagonistas subiendo fotos para sus fans, y la simulación de un feed en la secuencia de cierre de cada episodio. Un recurso arriesgado ya que cuelga un ancla algo excesiva en esta Ć©poca (a la velocidad que se desarrolla todo en Internet, igual YouTube e Instagram son historia en 10 aƱos) a la par que ingenioso, ya que nos permite recabar información adicional sobre los personajes sin tener que aƱadir mĆ”s al guión. Una imagen dice mĆ”s que mil palabras y aquĆ lo aprovechan al mĆ”ximo. ¿Que igual esto no se entiende del mismo modo en 10 aƱos? Da lo mismo, ahora mismo es magnĆfico y es lo que importa. Lo mejor de 2016, sin duda alguna.
Ficha TƩcnica
Nombre Original: Yuri on Ice!!
Director: Sayo Yamamoto
Estudio: MAPPA
AƱo: 2016
GƩnero: Romance, Deportes
CategorĆa: Yaoi/Seinen


0 Comentarios
Se respetuoso o se borrarĆ” tu comentario. Gracias.