Aquella villa a las afueras


Si hay un barrio verdaderamente singular en la ciudad de Nueva York ese es el Greenwich Village, cuna durante las décadas de los '60 y '70 de la intelectualidad más libertaria, testigo, por ejemplo, del advenimiento del movimiento folk rock abanderado por un joven Bob Dylan o de la primera manifestación a gran escala a favor de la comunidad gay en los USA. Se podrían citar cientos de referencias a hechos de carácter cultural que se refieren a este simpático y bonito barrio de la bahía del Hudson, pero es también el hogar de cierto personaje muy docto en las artes místicas : Stephen Extraño, más conocido como el Doctor del mismo sobrenombre.

No fue un hecho casual que Stan Lee y Steve Ditko situaran a su creación en este lugar, la conocida como Sancta Sanctorum del doctor servía como punto de encuentro mágico para todos aquellos que buscaban ayuda ante problemas que sólo un hechicero de primer nivel podía resolver. El ambiente esotérico y de fuerte creencia en las ciencias ocultas que habían manifestado ciertos personajes de relevancia pública como los miembros del grupo Led Zepellin o The Blue Oyster Cult hacían que el movimiento New Age estuviera muy de moda. Así pues diseñaron a un personaje muy basado en los seriales radiofónicos pulp de los años 30, como Chandú el mago.

La historia del Doctor Extraño es la una redención en toda regla; inicialmente se nos presenta a un tipo que es el mejor cirujano del mundo pero que al mismo tiempo es un ser mezquino y ególatra que sólo ve su propio ombligo. Tras un accidente de automóvil salva la vida milagrosamente pero esas manos que antes obraban maravillas han quedado inservibles para ejercer su profesión.

Desesperado, emprende un viaje iniciático en busca de respuestas. Éstas le llevan al Himalaya donde encuentra un anciano que le toma como su pupilo, mostrándole una verdad que nunca habría soñado. A partir de ese momento Stephen va a dedicar su vida a ayudar a otros, y lo más importante, a ser la primera línea de defensa mágica contra las fuerzas demoníacas que acechan desde las sombras a la humanidad.

Wong... mira a ver quien llama antes de abrir la puerta, por favor...

Como en cualquier título de esta realeza siempre tiene que haber un personaje que establezca el contrapunto necesario, villanos aparte como el Barón Mordo o el terrible Dormammu, el buen doctor cuenta siempre con la ayuda de su fiel criado Wong. No es una relación jefe – empleado al uso más bien es una amistad en la que éste tiene que cubrirle las espaldas en numerosas ocasiones, especialmente en lo concerniente a los devaneos amorosos de su patrón, que a veces le causan más de un disgusto. Esta relación es la que explota al máximo la historia que tenemos entre manos : El Juramento.

Ese por el cual los médicos dedican su profesión a preservar la vida humana, también lo ha de de ser para Extraño, que ve como su mejor amigo es acosado por una terrible enfermedad por lo que deberá a viajar a otra dimensión en busca de un elixir para curarlo.

Como os podréis imaginar la cosa se complica y el citado elixir no es otra que una vacuna contra la mayor plaga del siglo XX y parte del presente, por lo que habrá más gente interesada en el dichoso líquido. Tras ser tiroteado por un curioso ladrón en su propia casa es trasladado por Wong hasta la taciturna consulta de “la enfermera de noche “, una profesional que se dedica a atender a héroes que llegan malheridos a horas intempestivas.

La trama se va complicando más y más a medida que descubrimos que el pasado del Doctor Extraño ha venido a buscarle y hará lo que sea por acabar con él. Hay sorpresas, y de las buenas, hasta al final. En esto radica la fuerza y la magia de esta obra, nunca mejor dicho.

Una actualización deliciosamente “heavy” del Doctor Extraño y su mundo. La mejor que se ha visto en muchos años. Hay que explicar que tras los sucesos de “Civil War “ el papel del mago ha ganado muchos enteros, devolviéndolo a sus épocas de mayor esplendor setenteras.

En medio de toda a esta vorágine nos encontramos a Marcos Martín, que insufla toneladas de talento a esta obra aportando una gran frescura en cada viñeta, gran conocedor de la zona del Greenwich Village, en la que ha residido durante algunas temporadas, da un toque de cercanía a los personajes que a mi particularmente me gusta mucho.



La historia tiene un ritmo muy bien narrado. No cae nunca en la confusión y sirve como una perfecta para el neófito en el Doctor Extraño.

Como decía, es muy difícil no hacer ningún tipo de spoiler para comentar esta obra, probablemente uno de los casos con los que me he encontrado en este sentido, pero no puedo acabar esta reseña sin hacer referencia a la magnífica escena de la lucha final en la azotea. Cuando la hayáis leído comprenderéis como yo lo he hecho hasta qué punto es un cómic repleto de talento por los cuatro costados.

Es 2016 y el Doctor Extraño está más vivo que nunca. Supongo que todavía le podréis encontrar en su casa del Village.

¡Qué el ojo de Agamotto os guíe!!! hasta el próximo capítulo. (Esto me ha quedado un poco Iker Jimenez, ¿no?)

Ficha Técnica


 
Doctor Extraño

El Juramento (Brian K. Vaughan , Marcos Martín )

Panini ediciones

tapa dura ,188 páginas.

Precio : 9,99 euros.