Tras leerme Memorias de una Geisha de Arthur Golden, ver la pelĆ­cula (muy desacertada a mi parecer…) e indagar un poco, pude apreciar que tras la edulcorada historia se escondĆ­a algo desde mi punto de vista mĆ”s sórdido: no todo en ese mundo de flores y sauces era tan fantĆ”stico ni todas las geishas terminaban siendo consideradas prostitutas por los occidentales.

Vida de una Geisha de Mineko Iwasaki (la Geisha a la que entrevistó Arthur Golden para inspirar su obra y que precipitó que Ć©sta escribiera su versión…) captó mi curiosidad y necesitaba saber mĆ”s.
De la mano de ECC os traigo
Historia de una Geisha. Brutal.

Argumento


Tsuru (apodada la Grulla por su costumbre de quedarse de pie a la pata coja) es vendida como sirviente (shikomikko) por el precio de un saco de arroz, tales eran las penurias en su familia.

Entra en una okiya en la que la patrona es dƩspota y cruel pero poco a poco, acompaƱando a las geishas en sus salidas y recibiendo los conocimientos necesarios, llega a ser geisha con el nombre de Otsuru.

Opinión


Desde 1972 este prolƭfico mangaka lleva deleitƔndonos con sus obras; Shura Yokihime (junto a Kazuo Koike) y Dousei Jirai fueron sus primeras incursiones en el mundo a travƩs de la Kadokawa ShƓten y Manga Action (Futabasha) en las que el yuri en la primera y el slice of life en la segunda, despegaron su carrera.

Los dramas y las pinceladas históricas como Syura Yukihime-Fukkatsu no Shou o Shina No Kawa hicieron de él su santo y seña por la precisión de sus pinceladas y el rigor histórico.

La obra que nos ocupa se publicó por primera vez en 1974, aunque Shogakukan la sacara en 1996, posteriormente a la muerte del autor (1986) y consta de un solo volumen en el que a través de la vida de Tsuru se repasa la historia japonesa desde la incipiente guerra de Manchuria hasta la Segunda Guerra Mundial con un dibujo espléndido, soberbio diría yo; la reconstrucción del ambiente, la maestría narrativa que exhibe, consigue tocarnos las entrañas bajo el perfil de una mujer que pasa por las diferentes etapas de su vida y se encara al mundo con valentía, sin edulcoramiento ninguno.

Este mangaka conocido sobre todo por la ya nombrada Shurayuki-Hime (Lady Snowblood) y su secuela Syura Yukihime-Fukkatsu no Shou, obra confesa en la que se inspiró Tarantino para su película Kill Bill, vive una fructífera carrera con el guionista Kazuo Koike de donde salen Bourbon Keisatsu (1978) o Shina no Kawa (1973). Sus trazos guiados por un maestro como Koike, no dejan de sorprenderme; Yu Aku fue su guionista en el josei Akuma no Yo una Aitsu (guionista que solo ha publicado dos obras. La otra es la reciente Setouchi Shounen Yakyuudan) y Masako Togawa en Inkaden. Su carrera en solitario ha dado joyas como Kyoujin Kankei, Ougongai o Mansion Blues por citar algunas, cada una de una temÔtica distinta en las que el dibujo es la parte primordial.

Pero Itezuru es una obra intimista, la recreación de la vida cotidiana de una geisha desde su infancia hasta la madurez y en la que el entorno y la historia exterior son personajes importantes, no meros secundarios. Así mismo, es muy destacable que Tsuru sea comparada con una grulla, no sólo por esa manía física, si no por su simbolismo: las grullas en la antigüedad eran asociadas a la prudencia y la vigilancia, así pues, queda perfectamente definido el carÔcter de nuestra protagonista.

Las historias son autoconclusivas y aunque la narrativa sea esplĆ©ndida y se lea entre lĆ­neas lo que expresa el dibujo, creo que se ha condensado demasiado en un solo tomo. Querer abarcar grandes hechos históricos y a la vez centrarse en una sola figura para contar un relato dan la sensación de quedar inacabados, aunque todo quede perfectamente hilvanada es imposible no preguntarse un “y si…”.

Ficha TƩcnica


Nombre Original: Itezuru 凍鶓

Autor: Kazuo Kamimura

Género: Costumbrista, histórico

CategorĆ­a: Seinen

Año: 1996 Japón, 2015 España

NĀŗ Tomos: 1 (Bunkoban)

Editorial: ECC