“Sin aquĆ­ no hay allĆ­.

Sin allĆ­ no hay aquĆ­”.

Con esta reflexión arranca uno de los mangas de suspense mÔs exitosos de este año, en el que a través de la vida de un escritor, descubrimos que nadie es inocente y nada es lo que parece.


Shun Mizorogi es un escritor que parece haber encontrado el camino al éxito con su obra Utsubora, tras varios años en hiato. Sin embargo, una llamada de la policía en la que le pregunta por su relación con Aki Fujino, descuadrarÔ su vida a partir de entonces.

Aki Fujino parece haberse suicidado y entre sus pertenencias se halla el móvil en el que el nĆŗmero de Mizorogi aparece, asĆ­ que al personarse en el hospital K para intentar corroborar que se trata de Fujino, pues el cadĆ”ver estĆ” muy desfigurado, se topa con Sakura Miki, con rasgos muy parecidos a  Fujino que dice ser su hermana.


Poco a poco, se va descubriendo la relación entre el escritor y su discípula y la obra en la que ambos estÔn vinculados: Utsubora.


Asumiko Nakamura arranca su carrera dedicĆ”ndose al gĆ©nero yaoi con sus obras Koponikus no kopiuu (2002) o J no subete (2004), aunque toca varios gĆ©neros como el slice of life con Doukyusei (En la misma clase, publicado por ediciones Tomodomo en EspaƱa) o el lolicon y yuri en  2 Shuukan no adventure (2008).

Su estilo netamente shƓjo encuadra perfectamente una historia con tintes de novela negra, un seinen en toda regla en el que sus lƭneas definidas y la languidez de los rostros dan paso a las emociones contenidas de los personajes.

Que estÔ acostumbrada a dibujar personajes del género masculino, mÔs que del femenino, queda reflejado en la falta de proporciones a la hora de medir manos o pies: son desproporcionados en relación a la finura del cuerpo femenino, pero mÔs allÔ de eso, el dibujo es fino y muy correcto.

La edición de Milky Way, con las portadas de ambos tomos aterciopeladas, mostrando la fragilidad de la protagonista, son todo un acierto y uno de los motivos que me impulsaron a comprar la obra.

Un guion oscuro en el que la trama se va enrareciendo y donde ningún personaje es inocente del todo: desde el escritor Mizorogi, hasta su sobrina Kotomi, cuya relación con el periodista roza la pederastia en algún momento; plagio, relaciones humanas, maltrato (no tiene porqué ser físico), nada estÔ fuera de contexto en este relato donde la psique humana queda al descubierto en todas sus facetas.

La historia empieza muy fuerte con el supuesto suicidio de Fujino, las pruebas que apuntan al escritor que se querƭa quedar con su obra, pero en el segundo tomo se ahonda mƔs en los secundarios. Unos secundarios de lujo, con sus vidas mƔs bien miserables, en las que sus metas se forjan en el dƭa a dƭa, sin pensar quizƔs en el futuro y sin valorar las consecuencias de sus actos.

De la autora sorprende sobre todo el guion y la capacidad que tiene para poner suspense en algo que se da por hecho a priori y cuyas vueltas de tuerca pueden ocasionar mƔs de un dolor de cabeza. Vuelvo a insistir en que nada es lo que parece, no es una historia fƔcil de contar y mucho menos cuando los giros inesperados te hacen replantear todas las pautas.

Es un manga para leer con calma y sin prisas, porque si no se nos escaparƔn muchos detalles sin los que no vamos a saberla seguir y/o entender la historia.

Sorprendente serĆ­a la palabra que mejor define esta obra. Si os gusta su dibujo y la novela negra, esta obra es una buena forma de casar dos gĆ©neros de los que hay pocos “experimentos”: seinen y el gĆ©nero noir.


Ficha TƩcnica:


Nombre original: Utsubora

Autor: Asumiko Nakamura

Género: Suspense, psicológico

CategorĆ­a: Seinen

Año: 2008(Japón) 2015(Esp.)

NĀŗ Tomos: 2

Editorial: Milky Way