Esta vez viajamos a 1996: Nickelodeon y un boom que catapulta a la cadena al Ʃxito.

Con Ren & Stimpy (humor Ôcido y no apto para niños precisamente), se fueron implementando nuevas series tal como "Doug" y "Rugrats, aventuras en pañales", con bastante emisión; sin embargo faltaba algo que hiciera saltar la banca, y ese boom fue un pequeño chico de 9 años de edad con cabeza ovalada, pelo rubio y una gorrita azul.


Esta serie que abarcó desde 1996 hasta mediados del 2004, es una de las que mĆ”s recuerdo de la Ć©poca dorada de Nickelodeon. AdemĆ”s de las moralejas que daba, ¡me encantaba el dibujo! (la dignidad de Scabb sigue y sigue y sigue cayendo).

El personaje principal posee una cabeza en forma de balón americano, quien vive junto a sus abuelos (se desconoce el paradero de los padres) en una casa de huéspedes que alquilan a varios inquilinos. Se destaca por dar buenos consejos y por su nobleza, es Gerald (su mejor amigo) quien lo define como un soñador pero con los pies en la tierra.

La manera de ver la vida, los sentimientos que emanan de la mente del protagonista es la esencia de la trama, sin embargo las palmas se la lleva Helga, compaƱera de curso, enamorada perdidamente de Ʃl pero escondiendo su faceta tierna, por temor al rechazo y a la burla. Cada intento por acercarse es una catarata de lƭos, al que se suman parientes, vecinos, amigos o conocidos. Sin perder la "bestialidad" nos muestra el lado que todos tuvimos cuando Ʃramos pequeƱos, aunque en forma exagerada.

Las familias son variadas y con diferencias notorias, sean sus personalidades, cantidad de miembros, padres; la economía mostrada según la clase social, aspecto que no estÔ ligado al azar pues muchos episodios muestran el desconcierto de los chicos ante situaciones que no entienden del todo. La familia es un valor muy alto, mÔs para Arnold quien no conoce a sus padres y todo se lo debe a sus abuelos.

Estos, por su parte, no son convencionales, Phil mantiene una salud de hierro a pesar de sus aƱos, su esposa Gertie pareciera sufrir de principio de Alzheimer pero da la nota con distintas habilidades, sean de tipo artƭstico o fƭsico. Como toda pandilla, las juntadas para los eventos fuera de la escuela son un clƔsico, uniƩndose al gripo de Arnold, Gerald y Helga varias personajes que podrƭamos llamar secundarios, revelando peculiares identidades y temperamentos, sean del tipo timidez, abusivo, compaƱerismo, amor, fuerza, etc.

Los 100 episodios muestran las peripecias y aventuras del grupo, tomando para el aldo humorĆ­stico las rivalidades, los juegos, anhelos, las primeras citas, en un correr de situaciones cotidianas. Las bandas de mĆŗsica, el teatro (donde Helga harĆ” lo que sea con tal de interpretar a julieta "de casualidad", ya que Romeo es... Arnold; las diferencias con los adultos, los primeros trabajos, leyendas del barrio, dan un tĆ­tulo ameno y que no defraudarĆ” en ningĆŗn momento.

AdemƔs de la amistad, los valores como la honestidad o fidelidad son mostrados en forma directa, las consecuencias de las malas acciones traen sucesos que luego se deben enmendar. En resumen una serie animada que sin ser ƱoƱa aleccionaba a las generaciones tras la tv.

La serie fue doblada en MƩxico por varios conocidos dentro del ambiente, Helga tiene la voz de Christine Byrd, Sakura en "Naruto", Suzuna Taki en "Eyeshield 21", por mencionar algunos trabajos. Phoebe es interpretada por Rossy Aguirre, Akane Tendo en "Ranma 1/2", Ami Mizuno en "Sailor Moon", Cereza en Saber Marionette.

El protagonista principal es Kalimba Marichal, mÔs conocido por sus canciones que por su labor de seiyu. Enzo Fortuny (InuYasha) pone las cuerdas vocales a Arnold en la última temporada, un vocalista que siempre ayudó a Nickelodeon para varios de sus productos.
 A su vez el abuelo en la versión original en inglĆ©s, posee la dicción de Dan Castellaneta, Homero en Los Simpsons.

"Oye Arnold" mantuvo muy altos picos de audiencia...pero el trono no es eterno y a finales del siglo un nuevo competidor se alzó con la corona, seh, estoy hablando de Bob Esponja y sus amigos Patricio, Calamardo y demĆ”s...¡cómo odio esa canción de presentación! grrr, grrr. Nos vemos en otro nĆŗmero