En la historia del manga Lost+Brain, de Tsuzuku Yabuno y Akira Otani, encontramos a Ren Hiyama, un estudiante muy inteligente y el presidente del consejo escolar. Cree que los demás son inferiores y al asistir a una clase de hipnosis con el profesor Itsuki Kuonji, nace en él el deseo de cambiar el mundo a través de esta técnica, suprimiendo la debilidad humana. 

Sombra de plagio 

Para los coautores de esta obra, que fue su opera prima, cayó como un jarro de agua fría la comparación con Death Note, y la verdad es que no es para menos: tiene una trama muy parecida y el diseño de los personajes casi calcados a ésta (solo hay que ver la portada del primer volumen, donde es fácil reconocer en el protagonista Hiyama a Light Yagami), lo que ha hecho que los fans que tiene Death Note recuerden las facciones de sus ídolos. 

Tal vez por esto, Otani ha cambiado de registro y a continuación se lanzó a un manga llamado Le tour! que trata sobre el ciclismo, un tema del que hay pocas deferencias en los mangas nipones. 

Interior del manga Lost+Brain

Al margen de que se hayan inspirado en Light para su protagonista, los demás personajes, a excepción del profesor Kuonji, de aspecto andrógino con muchos rasgos afeminados (larga cabellera, finos rasgos faciales y túnica que no deja imaginar su masculinidad), están carentes de personalidad y detalles. Del mismo modo, los fondos brillan por su ausencia y cuando salen, son trazos poco definidos, tan solo sirven para identificar el sitio en el que se hallan y poco más. 

El batiburrillo de viñetas llenas de diálogos y con poco dibujo nos narra una historia que, si bien es interesante, parece hecha a trompicones y la escasez de detalles se ve suplantada por largas conversaciones, donde nos explican lo que no vemos y a qué se deben determinadas situaciones, eso sí, sin omitir detalle. 

Un mundo a medida 

El tema de intentar cambiar el mundo o a sus habitantes no es un invento de la afamada Death Note. Ya en mangas más antiguos como Mazinger Z o  el Dr. Slump, el ser humano ha buscado deshacerse de sus debilidades y/o complejos para crear un mundo a su antojo en el que se encuentre más a gusto, sin tener en cuenta a los demás. Aunque este tipo de relato esté muy explotado, llama la atención que en este caso no se haga uso de fuerzas sobrenaturales, como shinigamis, hadas y demás seres fantásticos, o la creación de robots más que dudosos para conquistar el mundo, sino que se utiliza para ello la hipnosis. 

Esta se basa en el hecho constatado y con base real en la que la hipnosis se utiliza para erradicar muchos miedos u obsesiones. En este caso, sirve para que los humanos no sean de carácter débil y aumenten la confianza en sí mismos, pudiendo lograr más cosas con menor esfuerzo. 

Es una lástima que un relato que engancha desde la primera página se vea deslucido con el agolpamiento de sucesos en los cuales parece que a los autores se les haya ido de las manos la historia y quieran terminarla deprisa y corriendo, dejando en el aire muchas incógnitas por desvelar. La comparación con el susodicho Death Note termina en el primer tomo cuando empieza a desarrollarse la historia, más real y plausible, pero poco aprovechada. 

Un relato de esta magnitud en solo 3 volúmenes hace que los hechos se precipiten, dejando sin aliento al lector, que no termina de encadenarlos y muchos quedan en entredicho. A pesar de todo, el final no llega a concretarse y hay una puerta abierta a una continuación. 

En resumen, un manga para pensar qué puede lograr hacer el ser humano con su inteligencia. 

Lo mejor: la historia, que podría ser real. 
Lo peor: la precipitación de los acontecimientos y un final más que previsible.

Ficha técnica

Portada del manga Lost+Brain

Nombre original: Lost+Brain 失わ+脳 
Autor: Tsuzuku Yabuno(guion), Akira Otani(dibujo) 
Género: Psicológico, misterio 
Categoría: Seinen 
Año: 2009 
Número Tomos: 3